8 de julio de 2009

Los Macbeth’s: Tránsito del más acá al más allá


Una línea invisible separa, si es que lo hace, el mundo real del espectacular. Al atravesar el portón de la Casa de la Cultura del Prado para presenciar la puesta de Los Macbeth´s se transita por esa frontera. Se deja atrás la casona municipal antigua y su quehacer cotidiano al ascender por la escalinata de su fachada, y ser recibidos por candelabros con velas encendidas que imponen la primera señal de que el lugar ha sido transformado, el espacio es definitivamente otro: los visitantes serán los convidados de la mansión Macbeth.

Puertas adentro el mayordomo Günter recibe a los presentes y los invita a ir descubriendo la intimidad de la familia y, por tanto, sus secretos. Algo mágico sobrevuela en el ambiente: la intervención escenográfica, el bellísimo vestuario, el delicado trabajo de iluminación y la ambientación sonora nos transportan a un verdadero más allá: a ser parte activa de una experiencia teatral lúdica.

La puesta tiene un objetivo claro: lograr que el espectador se involucre en el juego, como una pieza más, muy necesaria en esta historia de sugestión. Ese juego es posible en ese lugar alternativo, ajeno a lo cotidiano. Para realizar el viaje y lanzarse a jugar se hace necesario un guía. Así el mayordomo es el responsable de dar a conocer las reglas y el funcionamiento, la imaginación de cada cual pone el resto. En este camino hacia lo teatral el guía no puede ser otro que un actor: en su interpretación y recepción se establece el nexo, el pacto con el público. El teórico ruso Nicolás Evreinov afirmaba que el actor está movido por un instinto teatral que logra transformar todo lo real que lo rodea. Así la sola presencia de Günter (Adrián Prego), más allá de su invocación oral, nos transporta a un mundo paralelo, el de la ficción, en el que el público será, en cierto modo, otro personaje.

La fuerte y cercana presencia actoral es el resultado del trabajo en conjunto entre la directora María Dodera y Marina Cultelli quienes dispararon, en base al texto, improvisaciones para fomentar la dramaturgia del actor. Así la apropiación y el vínculo con el espacio alcanzó una naturalidad especial, un diálogo fluido escena a escena. Así también se generó un ritmo y dinámica perfecta en los diálogos, localizaciones y movimientos de los actores, que no se quiebra ni disipa más allá de la constante presencia de los “visitantes invisibles”.

Los Macbeth’s nos trasportan a un lugar y un tiempo “otro”, para alejarnos voluntariamente de lo cotidiano y sumergirnos en un mundo sobrenatural. El riesgo de perderse en esa realidad alternativa vale la pena.


Autor: Adaptación del texto de Shakespeare a cargo de Marina Cultelli (en base a la dramaturgia del actor)

Dirección: María Dodera

Elenco: Nicolás Suárez, Rosana Rey, Adrián Prego, Nadia Navarro

Casa Municipal de Cultura – Prado. Lucas Obes 897. Teléfono: 336 7021.

Enlace: http://losmacbeths.blogspot.com/

Fotos: Jorge Boschi

4 de julio de 2009

Entrevista a María Dodera: Las múltiples caras de la dramaturgia


Los Macbeth´s es la última puesta de la directora María Dodera. Como en algunas de sus creaciones anteriores la obra está montada en un espacio no convencional, resignificado estéticamente, y transformado en la mansión Macbeth donde se desarrolla un juego. Dodera responde acerca del desafío de actualizar un clásico, el manejo del espacio en su teatro y el trabajo con la dramaturgia del actor.

¿Cuál es tu vínculo con el texto original de Shakespeare?

Siempre fue un autor que me fascinó. En el año 1997 gané una beca llamada Shakespeare aquí, 1997, donde interrogué a varios directores y creadores acerca de por qué hacían Shakespeare (a artistas de Uruguay, Brasil, España y Londres) También les pregunté si pensaban que era necesario actualizar sus textos.

Fue muy interesante porque los puertos a que llegaban eran similares: en Shakespeare todos ellos encontraban la mayor humanidad, se recurría a él en tiempos difíciles, frágiles. Y concluían: "Shakespeare marcó el camino", el propio Shakespeare actualizaba hechos e historias a su "tiempo" y a su "verbo".

¿Cómo surge la idea de realizar esta reescritura?

En esta experiencia en particular partí de un trabajo realizado con mis ex-alumnos de Puerto luna. Con ellos en el 2002 hicimos un proyecto llamado Shakespeare: tres platos y decidí retomar el "plato" Macbeth con los mismos actores. Juntos nos planteamos revisarlo y re inventarnos en esta lectura.

Para eso llamé a Marina Cultelli y practicamos "la dramaturgia del actor", un método que venía trabajando en mis últimos espectáculos. Mediante esta forma de trabajo el actor, y todos los participantes del hecho teatral, operamos a través de la escritura automática (desde el inconsciente) teniendo como parámetros la matriz lingüística de la pieza e improvisaciones que iba formulando desde la dirección. Estas improvisaciones debían ser fieles a reglas y objetivos del juego planteado.

Nos formulamos la Sra y el Sr Macbeth como eje central, y en este juego fueron surgiendo otros personajes como el Mayordomo que va narrando la misma historia en un meta- texto, y la niña que nunca duerme como línea divisoria entre lo natural y los sobrenatural. Para nuestra lectura interna "la niña que nunca duerme" era la reina de las brujas.

En tu trabajo en conjunto con Marina Cultelli ¿qué lugar entienden que ocupa el actor?

Para mí el actor tiene el papel central. Es el creador primero y último del juego teatral, de la formula teatral que proponemos, del tipo de comunicación planteado al público. Es central pero colectivo, y digo esto porque creo que es la "regla de oro del teatro". Desde el comienzo de los ensayos me gusta trabajar en forma colectiva con los técnicos, para que también sea parte de nuestra comunicación la estética global en comunión con la estética actoral.

Para quien asiste al espectáculo, la Casa Municipal de Cultura del Prado parece ser el lugar natural de esta historia ¿Cómo fueron descubriendo los diferentes ambientes que utilizan en la puesta? ¿de qué manera fueron apropiados por los personajes? ¿qué valores crees que posee el espacio en toda puesta de teatro?

Yo soy amante del teatro en lugares no convencionales, me parece que se le plantea una aventura al espectador. Es una fórmula de juego que me estimula a nivel teatral y me divierte. Cuando vi la Casa Municipal de la cultura me dije:¡es aquí mismo! Fuimos descubriendo los espacios a través de "los espacios mismos". En ese juego de improvisación, con reglas y objetivos concretos, incluía como un parámetro el espacio. Operamos la dramaturgia del espacio. El espacio tiene zonas de misterio, de ruido, zonas para amar y zonas para odiar. Zonas para crear y quedarse y zonas para morir y retirarnos o quedarnos desde otro lugar. El espacio alberga el misterio del trayecto, y en el tiempo: el misterio de la esencia del juego teatral.

El vínculo que se establece con el público es muy cercano ¿cuál es el rol asignado al espectador en esta historia?

Como lo plantea directamente el juego: volverse invisibles tocando una pared y espiar a los Sres. Macbeth´s que aún están ocupados, pero pronto nos invitarán a su "fiesta".

Luego del estreno has podido ser parte como directora, también de ese público ¿cómo te encuentras desde ese lugar?

Me encanta, entro y juego. Estoy muy feliz del trabajo realizado.


Autor: Adaptación del texto de Shakespeare a cargo de Marina Cultelli (en base a la dramaturgia del actor)

Dirección: María Dodera

Elenco: Nicolás Suárez, Rosana Rey, Adrián Prego, Nadia Navarro

Casa Municipal de Cultura – Prado. Lucas Obes 897. Teléfono: 336 7021.

Enlace: http://losmacbeths.blogspot.com/

Foto: Jorge Boschi